26 ene 2006

cinco extraños hábitos propios

Ruy Feben y Lillit Galaktik envíaronme este malévolo (meme) ejercicio. En realidad esto podría parecer una cadena de esas donde mandan monitos con caritas de Jesús o con fines de buena suerte. Pero si lo tomamos desde el lado psicológico podría resultar un muy buen ejercicio de autosuperación tipo Cornejo.
Ahora bien, que si la onda del blog es sacar todas tus neurosis pues entonces no desentona naditita esto de los malos hábitos. De hecho varias veces me ha pasado por la cabeza abrir un blog anónimo donde lo más sucio y perverso de mi se plasme sin necesidad de hacerme sentir "expuesto".
Antes que nada las reglas:

a) El título del post donde lo hagan debe ser “5 extraños hábitos propios”.

b) Deben pasar el meme a otras cinco personas.

c) Cuando lo hagan, deben avisarles a sus cinco enmelados, diciéndoles por cualquier vía la siguiente frase: “Has sido elegido/a para hablarme de tus malos hábitos”.

Una vez aclarado, ahí les van mis cinco malos hábitos:

1.- Usualmente llevo siempre mi walkman - que de por sí ya es un mal hábito-, y acostumbro a armar escenas de videoclips con la música que emiten mis audífonos combinándolos con lo que veo en la realidad.

2.- Me como las uñas, en todo momento, y en todo lugar. una vez me las dejé nada más para ver cuanto aguantaba y después de dos semanas ya las tenía todas mugrosas, así que opte por seguírmelas mordiendo porque según yo me resultaba mucho más higiénico.

3.- Soy muy impuntual. Una vez tuve una novia con la cual si llegaba tres minutos tarde, ya no salía conmigo. La puntualidad se volvió una obsesión conmigo. Un día decidí que eso de la puntualidad ya me iba a valer madres , pero creo que me fui al otro extremo. Lo curioso es que cuando ahora si quiero llegar temprano siempre hay algo que se me interpone para que suceda (es realmente sorprendente la cantidad de estupideces y vicios que uno puede justificar metafísicamente).


4.- Siempre, cuando escribo, en todo momento y en todo escrito pongo paréntesis y guiones largos. Habitualmente los uso para poner mis pensamientos entre otros pensamientos -como en esta ocasión-, y se me ha quedado la mala costumbre, pero bueno, ¿qué le puede uno hacer?

5.- Invariablemente, siempre y sin excepción todas las mañanas me despierto con una canción en mente. es como despertar y en ese mismo instante empezara el soundtrack del día. alguien en mi cabeza de quien no tengo aún mucho control se apodera de mi reproductor musico-mental y pone la misma canción una y otra vez hasta que la escucho para que se salga del cerebro.

Puedes morbosear en los siguientes blogs:

2 comentarios:

Malu Herrera dijo...

tengo una duda... y si ya los habia posteado? ok... haré unos diferentes... jeje

Ricardo Cortizo dijo...

Y hablando de cosas raras, nos lanzamos?

Un abrazo